Los precios petroleros terminaron en fuerte alza el lunes, impulsados por una parálisis del principal campo petrolero de Noruega y temores de que se profundice la guerra entre Rusia y Ucrania.

El precio del barril de Brent del mar del Norte para entrega en enero subió 3,18% a 73,30 dólares.

En tanto, el West Texas Intermediate (WTI) para diciembre trepó 3,19% a 69,16 dólares.

Para Andy Lipow, de Lipow Oil Associates, «es una combinación» de factores que permitió al crudo ganar terreno.

El mercado subió primero por la decisión del presidente estadounidense, Joe Biden, de autorizar el uso de misiles de largo alcance provistos por Washington para ataques ucranianos en territorio ruso.

Es un cambio significativo para la diplomacia estadounidense, ya que el gobierno de Biden se había negado hasta ahora a los pedidos de Kiev en este sentido.