Cacerolazos y consignas en contra del primer boletín ofrecido por el Consejo Nacional Electoral que otorga la victoria de los comicios al dictador Nicolás Maduro, se viven en Petare, la barriada más grande de América Latina, ubicada al este de Caracas, junto con las zonas aledañas en Caracas.

Desde las redes sociales ha reportado que, tanto en las barriadas como en las urbanizaciones cercanas los caraqueños han manifestado su descontento ante lo que catalogan como un fraude electoral.

También en zonas como El Paraíso, al oeste de Caracas, Guarenas, Guatire y Los Teques (en estado Miranda) se registraron cacerolazos.

Como parte de las primeras protestas que se registran, los habitantes han decidido asomarse a los balcones de sus hogares para hacer sonar las cacerolas, pitos o cornetas.

Caracas amaneció en total silencio, con las calles desoladas luego de que los venezolanos permanecieran hasta la madrugada en los centros electorales exigiendo el conteo de los votos