Hoy, 22 de abril, se conmemora el 574 aniversario del nacimiento de una de las figuras más trascendentales de la historia hispana: Isabel I de Castilla, conocida también como Isabel la Católica. Nacida en Madrigal de las Altas Torres en 1451, su reinado marcó un punto de inflexión en la península ibérica y sentó las bases de lo que hoy conocemos como España, dejando una huella imborrable en la cultura y el idioma de millones de personas en todo el mundo.

Isabel ascendió al trono de Castilla en 1474 en un período de gran inestabilidad. Su matrimonio con Fernando II de Aragón en 1469, aunque inicialmente controvertido, culminó en la unión dinástica de ambas coronas, un paso crucial hacia la unificación de España. Los Reyes Católicos, como se les conoció, implementaron reformas significativas en la administración, la justicia y el ejército, fortaleciendo el poder real y sentando las bases de un estado moderno.

Su reinado también estuvo marcado por eventos de profunda significación histórica. En 1492, las tropas castellanas y aragonesas conquistaron el Reino Nazarí de Granada, poniendo fin a siglos de presencia musulmana en la península. Ese mismo año, Isabel respaldó la audaz empresa de Cristóbal Colón, cuyo viaje allanó el camino para el encuentro entre Europa y América, un acontecimiento que transformaría el curso de la historia mundial y expandiría la influencia de la corona española a dimensiones nunca antes imaginadas.

El legado de Isabel la Católica es complejo y objeto de debate. Por un lado, se le reconoce su papel fundamental en la consolidación de España como una potencia europea y en la difusión del idioma español y la fe católica en vastos territorios. Por otro lado, su reinado también estuvo marcado por la expulsión de los judíos en 1492 y el establecimiento de la Inquisición española, medidas que generaron intolerancia y sufrimiento.

A pesar de las controversias, la figura de Isabel la Católica sigue siendo central para comprender la historia de España y de los países hispanoamericanos. Su visión política, su determinación y su papel en la configuración del mundo moderno la convierten en una figura histórica de enorme relevancia, cuya memoria perdura a través de los siglos y sigue resonando en la identidad de millones de hispanohablantes en todo el planeta. Hoy, en el aniversario de su nacimiento, recordamos su impacto duradero en la historia y la cultura hispana.