Las redes que captan mujeres para explotarlas sexualmente en España se ceban cada vez más en América Latina, en especial en Colombia y Venezuela, aprovechando la necesidad económica de sus víctimas o su desesperación para huir de la violencia, según datos oficiales y de oenegés.
«Tradicionalmente, la presencia de víctimas de Latinoamérica ha sido constante», pero «se ha observado un incremento de su porcentaje respecto a otras nacionalidades en los últimos años», aseguran a EFE fuentes del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado en España (CITCO).
Una problemática que corroboran organizaciones que ayudan a las víctimas, como Accem, que advierte de su vulnerabilidad tanto en sus países de origen como cuando llegan a España.
Las venezolanas y colombianas son más vulnerables
La estadística de este centro adscrito a la Secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio del Interior de España refleja que en su mayoría las mujeres tienen entre 28 y 32 años de edad y son de Colombia, Venezuela y Paraguay.
«Esta situación suele ser aprovechada por las redes de trata, utilizando el engaño respecto a la actividad a realizar en España o sus condiciones reales, así como la situación de necesidad extrema de las víctimas potenciales», subrayan.
Muchas llegan con el gancho de empleos como el servicio doméstico, pero acaban en burdeles al reclamar estas mafias una supuesta deuda por haberlas traído a España, que nunca se termina de pagar.
Leave A Comment