En medio de la crisis económica de Venezuela, Oriana Pérez inició un emprendimiento. Aunque su esposo trabaja y es madre de tres menores de edad, decidió hacer repostería para sumar ingresos al hogar. A finales del 2024, está a punto de abandonar su iniciativa porque no tiene cómo comprar los insumos.
Debo parar y buscar un trabajo porque no puedo seguir”, reveló a El Pitazo este 1 de noviembre. Comprar chocolate para marmolear sus tortas ya era un esfuerzo para ella, pero el incremento del dólar del Banco Central de Venezuela (BCV) y del paralelo, ha limitado su capacidad para adquirir la harina, los huevos y la leche.
Comprar medio cartón de huevos, por el que hasta hace una semana pagaba entre 90 y 100 bolívares, ahora le cuesta entre 115 y 120 bolívares. A su familia no le da para cubrir todos los gastos que necesitan. “Nos ha pegado muy duro, tenemos que arrastrar hasta donde la cobija alcance”, declaró.
Oriana, quien vive en el municipio Libertador, quisiera olvidar lo que está pasando, pero tiene claro que debe afrontar la realidad. “Compramos para no acostarnos sin comer”, confesó. Al ir a un abasto, un mercado de la comunidad o a un supermercado, compra menos harina y pasta porque no le alcanza.
Leave A Comment